La OIVE presenta #SomosVino2020, un análisis sobre el presente y futuro del sector vitivinícola

La OIVE presenta #SomosVino2020, un análisis sobre el presente y futuro del sector vitivinícola

Promovido por la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE), se presentó hoy -presencialmente en el CaixaForum de Madrid y vía streaming- el informe sobre la importancia económica y social del sector vitivinícola en España, #SomosVino2020,  con el que se pretende «poner en valor y dar a conocer de forma más amplia los diversos atributos sectoriales, para buscar un encaje más idóneo con la imagen que tienen sobre el sector vitivinícola los distintos agentes socioeconómicos, tanto de la esfera pública como privada y, en general, la sociedad española.»

El informe (ver pdf abajo) ha sido elaborado por Analistas Financieros Internacionales, sociedad que preside el economista Emilio Ontiveros, quien se encargó de presentar sus principales líneas de estudio.

Así, este análisis contempla, una caracterización de la amplia cadena de valor del sector vitivinícola, abarcando sus actividades núcleo: viticultura, elaboración del vino y comercialización. Pero también otra serie de actividades suministradoras clave, así como unas actividades conexas, entre las que figura el enoturismo.

Una vez perfilada la cadena de valor, realiza una estimación cuantitativa de la importancia económica del conjunto de actividades núcleo, reflejando su contribución al Valor Añadido Bruto y al empleo, así como también al erario público. Sin descuidar el efecto tractor ejercido sobre otras actividades económicas.

Asimismo, se complementa el análisis cuantitativo a escala nacional con una estimación del peso directo del sector en las distintas comunidades autónomas, y se reflexiona sobre la afección de la pandemia, perfilando las distintas vías transmisoras de un impacto sobre la actividad vitivinícola, de magnitud todavía incierta.

En una tercera sección, se aborda la dimensión internacional del sector, para recoger el desempeño de su tejido empresarial en los mercados exteriores y, con ello, la capacidad para impulsar la internacionalización de la economía española.

Al valor social del sector vitivinícola se dedica otra sección específica, en la que se apela a su capacidad vertebradora del territorio y a la promoción de flujos turísticos, entre otros aspectos.

Por último, previo a las conclusiones, se destacan algunos de los principales esfuerzos llevados a cabo por el sector vitivinícola para contribuir a la lucha contra el cambio climático y responder a su responsabilidad en materia de sostenibilidad medioambiental.

Emilio Ontiveros, un «manchego y disfrutador del vino«, como destacó en su intervención, calificó al sector como uno de los principales activos económicos que tiene este país, y subrayó el actractivo que nuestra industria vitivinícola está ejerciendo en el extranjero, con participaciones económicas directas que año a año van a más.

Este economista resumió su intervención destacando que a su entender el sector vitivinícola «está tomando una dirección inequivocadamente acertada«; que se aprecian luces al final del túnel de la actual pandemia del Covid-19, con claras señales de recuperación económica a medio plazo -aupadas por el cambio en la Presidencia de Estados Unidos y la posibilidad de neutralizar la propagación del virus a través de la vacunación-, y que España podrá crecer a mejor utilizando los 140 mil millones de euros del plan de ayuda de la UE en dos direcciones que marcará la transición medioambiental y la transición digital.

En el acto, en el que también participaron la directora y el presidente de la interprofesionala vitivinícola, Susana García y Ángel Villafranca, respectivamente, así como el director del segmento de negocio agrario de CaixaBank, AgroBank, Carlos Seara, concluyó con la intervención del ministro de Agricultura, Luis Planas, quien resaltó, a la luz del análisis presentado, las enormes posibilidades de crecimiento y futuro de los productores y el buen trabajo de la interprofesional para dar respuesta a los desafíos más inminentes.

El ministro se refirió, asimismo, a la pandemia y sus consecuencias para los productores de uva y vino. Al respecto, aseguró que el Gobierno “permanece muy atento” al impacto de la crisis sanitaria. Cuando en el futuro se vea lo que se ha hecho en tan poco tiempo y con tanta amplitud, “se comprobará claramente que hemos estado al pie del cañón”.

Planas mostró su confianza en la fortaleza del sector para avanzar hacia un nuevo modelo de producción agraria para el que el sector vitivinícola es pionero y referente en innovación y apuntó que la producción vitivinícola está muy bien posicionada en materia de agricultura ecológica, lo que va a suponer una ventaja a la hora de cumplir con las ambiciosas aspiraciones medioambientales de la nueva PAC y el Pacto Verde europeo.

 

Informe pdf: Afi_Estudiovf

 

 

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