El MAPA elevará a consulta pública en noviembre un primer borrador de Plan Estratégico de la PAC

El Ministerio de Agricultura tiene intención de elevar a consulta pública un primer borrador del Plan Estratégico nacional sobre la aplicación de la Política Agraria Común (PE-PAC), a principios del próximo mes de noviembre. Así lo señaló el ministro de Agricultura, Luis Planas, antes de iniciar por videoconferencia la Conferencia Política Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural con los consejeros del ramo de las distintas CC.AA. este jueves 21 de octubre.

El MAPA elevará a consulta pública en noviembre un primer borrador de Plan Estratégico de la PAC

En declaraciones a los medios, Planas precisó que el «momento clave» del PE-PAC será cuando éste sea aprobado por la Comisión Europea en los primeros meses del próximo año 2022. Hasta entonces, añadió, se trata de un “proceso de preparación”. El ministro mostró de nuevo su confianza en lograr durante este tiempo el consenso o, al menos, la opinión mayoritaria de las CC.AA. sobre los ecoesquemas, la principal medida novedosa de la próxima PAC, y de otras cuestiones.

Planas, como ya hiciera el pasado lunes, descartaba de antemano que fuera a producirse un «acto formal de aprobación» con las CC.AA. en la reunión de este jueves por videoconferencia e insistió en que los trabajos de elaboración del PE-PAC se prolongarán hasta que el Plan sea entregado a Bruselas, antes del 31 de diciembre de este año.

El ministro señaló incluso que la exposición a consulta pública del primer borrador del PE-PAC se solapará en el tiempo con el proceso de análisis, que deberá llevar a cabo la propia Comisión Europea, hasta principios de 2022

Después de que Bruselas apruebe el Plan Estratégico nacional, se deberá desarrollar en España la denominada “legislación secundaria”, en la que aún se seguirá entrando en los detalles de aplicación del mismo en nuestro país.

Planas recordó que, tras  la Conferencia Política Sectorial del pasado 14 de julio, el Gobierno ha mantenido hasta once reuniones técnicas con las CC.AA., en las que abordaron sobre todo la concreción y el desarrollo de los ecoesquemas prácticas sostenibles con el medio ambiente, con ayudas del primer pilar de la PAC, complementarias a las ayudas medioambientales del segundo pilar del de Desarrollo Rural.

Al respecto, el MAPA presentó en esta reunión a las CC.AA. una propuesta que reduce de nueve (en el texto anterior) a siete estas prácticas agrícolas en defensa del clima y el medio ambiente, que fijará un importe de ayuda por hectárea, que será siempre el mismo para cada tipo (8 tipos) de superficie de que se trate.

Además, añadió Planas, “habrá una práctica agrícola adicional,  relacionada con las superficies de regadío. Unas superficies que, para cobrar la ayuda directa por ecoesquema, deberán contar con una herramienta reconocida por las Comunidades para la gestión de agua de riego; con un plan supervisado por un técnico, así como con un cuaderno de explotación, relativo al uso de fitosanitarios.

El presupuesto de los ecoesquemas, que globalmente superará los 1.100 millones de euros anuales, se determinará para cada uno de los 8 tipos de superficie: pastos húmedos; pastos mediterráneos; tierras de cultivo secanos húmedos; tierras de cultivo secanos en general, tierras de cultivo de regadío; así como tres tipos de cultivos permanentes, los de pendiente inferior al 5 %, de entre el 5 y el 10 %, y más del 10 %.

Las prácticas agrarias, susceptible de ecoesquema, se dividen entre las realizadas en pastos permanentes y pastizales, para los cuales está previsto el pastoreo extensivo y la siega sostenible; las tierras de cultivo, que incluyen una mayor rotación de cultivos, la agricultura de conservación y la siembra directa, así como la gestión de superficies no productivas o paisajes; los cultivos permanentes, con cubiertas vegetales “vivas” o “muertas”, y superficies no productivas.

Según el ministro, «la Comisión Europea será muy celosa a la hora de comprobar que se llevan a cabo las prácticas de estos ecoesquemas, por los que se percibirá un 23% (25% con Desarrollo Rural) de todos los pagos  directas de la próxima PAC.

Pago redistributivo

Otra de los temas tratados ha sido el pago redistributivo, figura establecida por primera vez en España para una mayor equidad en el reparto de las ayudas, que se establecerá sobre dos umbrales en cada una de las 20 regiones, de manera que las explotaciones de tamaño medio, más profesionales, recibirán más importe por este concepto, mientras que para las pequeñas que se sitúen por debajo del primer umbral tendrá un efecto neutro.

La nueva PAC tiene también entre sus objetivos facilitar el relevo generacional. Por ello se incrementa de forma significativa el apoyo a la instalación de jóvenes, con un presupuesto de más de 140 millones de euros anuales. Ello equivale al 3 % del presupuesto total de las ayudas directas, un 2 % dentro de la complementaria a la renta para jóvenes, y otro 1 % de ayudas procedentes de las ayudas de desarrollo rural.

Habrá, además, incentivos adicionales para la incorporación de la mujer a las tareas agrícolas y ganaderas, una de las novedades de la nueva PAC.

Agricultor profesional

Otra de las cuestiones de debate, que aún siguen pendientes, al menos para las CC.AA., está siendo el de la de la definición del “agricultor profesional”. Aunque hay varias CC.AA. que discrepan con el ministro a la hora de definir qué es y qué no agricultor profesional, Planas señala que «no cabe discriminar entre categorías, sin causar infracción al reglamento europeo».

El ministro volvió a defender su planteamiento sobre que las tres “vías de entrada” para la percepción de las ayudas directas de la próxima PAC son la afiliación al Régimen Agrario de la Seguridad Social; un mínimo del 25 % de los ingresos totales, procedente de la agricultura, incluidos en ese porcentaje las ayudas PAC, y la percepción de hasta un máximo de 5.000 euros anuales de ayudas directas de la PAC.

Planas detacó que el 86 % de los pagos de las ayudas directas de la PAC con el nuevo modelo irán destinados a los agricultores con más de un 25 % de renta agraria, y se ha mostrado en contra de excluir a los demás productores, porque contribuyen en el mercado, cuidan el medio ambiente y generan empleos.

Planas ha agregado que deberán «convencer a la Comisión» del nuevo modelo de 20 regiones de pago básico y que han decidido modificar el nivel de convergencia de las ayudas para 2022 para que sea inferior a lo inicialmente previsto.

De esta manera, el porcentaje de convergencia (para que dos agricultores cobren lo mismo por desempeñar la misma tarea) aumentará un 3 % anual a lo largo de cinco años para situarse en el 85 %en el 2026, a final del periodo de aplicación de la nueva PAC 2023-2027.

A partir de 2025 se analizará si el final del periodo de convergencia supone el final del régimen de derechos. Para avanzar en la uniformidad de las ayudas dentro de una misma región de pago, esta convergencia será del 100 % en el 2029, según Planas.

Asimismo, el ministro ha detallado que se irán introduciendo en la Reserva Nacional progresivamente aquellas producciones como la viña y las frutas y hortalizas para que puedan ser perceptoras de la nueva PAC además de recibir programas de apoyo, aunque ha descartado que puedan entrar «en una única anualidad».

 

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