España cosechará 761.515 toneladas de arroz, un 27% más que en 2024, según Cooperativas Agro-alimentarias

Cooperativas Agro-alimentarias de España estima que la cosecha nacional de arroz para la campaña 2025/2064 alcanzará 761.515 toneladas, de las cuales 336.575 toneladas corresponderían a variedades Japónica y 424.939 toneladas a Índica.
Andalucía lidera la producción con 343.650 toneladas, seguida de Extremadura (150.238 t), Cataluña (138.957 t) y Valencia (101.004 t).
A nivel nacional, las cifras de producción se han posicionado un 27,43% por encima de las de la campaña 24/25 pero lejos de las más de 900.000 toneladas de 2011. El rendimiento medio nacional ha llegado a 7,82 t/ha, un +12,86% más que en 2024 y un +14,36% por encima de la media del periodo 2020–2024. Esta evolución positiva consolida la recuperación del potencial productivo tras varios ejercicios irregulares marcados por la climatología adversa.
En esta campaña, se han registrado variaciones positivas de producción y superficie en casi todas las zonas productivas, excepto Aragón, Navarra y la Comunidad Valencina. Destaca Andalucía con un 43% más de superficie y un 83% más de producción, seguido de Extremadura con un 6% más de superficie y un 7% más de producción.
Las variaciones en producción y superficie que se están produciendo en las últimas campañas han estado estrechamente ligadas a la climatología y al impacto creciente sobre el cultivo de las plagas y malas hierbas, agravado por la falta -cada vez más acusada- de herramientas eficaces para combatirlas.
El cultivo del arroz es clave para las regiones productoras, donde constituye, en muchos casos, la única alternativa agronómica viable. Aparte de ello, desempeña un papel fundamental en la biodiversidad, protección de aves migratorias y protección medioambiental.
El descenso forzoso de la superficie arrocera está provocando una caída de la producción con graves consecuencias económicas para las zonas rurales y un aumento de la dependencia de importaciones extracomunitarias.
Ante esta situación, el sector solicita la puesta en marcha de medidas urgentes y excepcionales que permitan la utilización de materias activas imprescindibles para la sanidad vegetal del arroz. La desventaja competitiva generada por restricciones fitosanitarias no armonizadas entre los Estados miembros de la Unión Europea -y frente a terceros países- pone en grave riesgo la viabilidad del cultivo en España.