Nuevas medidas de simplificación de la PAC: facilitar los pagos a agricultores y controles ambientales simplificados
La Comisión Europea (CE) presentaba el miércoles un nuevo conjunto de medidas para simplificar la Política Agrícola Común (PAC), que ofrece flexibilizar y facilitar los pagos a los agricultores y evitar un solapamiento de las normas sobre los controles ambientales a las explotaciones.
Prevé también mejorar el apoyo en caso de crisis, con «procedimientos más sencillos» para las administraciones nacionales frente a los casos de catástrofes naturales o enfermedades animales, gracias a nuevos pagos disponibles en el marco de los planes estratégicos de la PAC y a herramientas de gestión de riesgos más flexibles y accesibles.
Según la Comisión Europea, los cambios propuestos pueden suponer un ahorro de hasta 1.580 millones de euros anuales para los agricultores y 210 millones de euros para las administraciones nacionales.
El nuevo paquete agrícola se basa en las medidas de simplificación ya introducidas por la Comisión Europea en 2024 y forma parte de un proceso más amplio relativo a políticas que afectan a los agricultores, las empresas agroalimentarias y los gobiernos nacionales.
El comisario europeo de Agricultura, Christophe Hansen, ha dicho: «Nos encontramos ante la PAC más ecológica de la historia y eso no va a cambiar»; pero ha reconocido que el sector «es diverso y diversificado» y ha asegurado que las medidas que prepara Bruselas «abren la vía para un enfoque más a medida».
El objetivo de estas acciones, que deberán ser adoptadas por el Consejo (países UE) y el Parlamento Europeo para entrar en vigor, es también «impulsar la competitividad de los agricultores».
Principales elementos:
Pagos a los pequeños agricultores
Bruselas propone que el límite del pago único anual para los pequeños agricultores pase de 1.250 a 2.500 euros.
Además, estarán exentos de ciertas normas ambientales (condicionalidad), aunque podrán beneficiarse de pagos que premian la agricultura ecológica (ecoesquemas).
Hansen ha subrayado que los pequeños y medianos agricultores son «la columna vertebral de las zonas rurales» y aseguró que con las normas propuestas se pretende hacer su trabajo «más atractivo», evitar que las exigencias «desalienten» a los jóvenes a acceder a la profesión o lleven a los productores actuales a dejar de trabajar.
Requisitos y controles ambientales simplificados
El objetivo es adaptarse mejor a las prácticas agrícolas y condiciones locales y reducir solapamientos con las normas nacionales.
Por ejemplo, las explotaciones agrícolas con certificación ecológica se considerarán automáticamente como que cumplen con algunos de los requisitos ambientales de la UE a efectos de su financiación.
«Vamos a introducir más flexibilidad en los pastos permanentes». ha dicho el comisario de Agricultura, que ha añadido que por ejemplo se concederá «un plazo más amplio», de siete años en lugar de los cinco en vigor ahora, para que las tierras se clasifiquen como pastos permanentes.
También podrán beneficiarse de incentivos para la protección de turberas y humedales.
Además, se agilizarán los controles mediante el uso de satélites y tecnología para reducir la carga administrativa y se introducirá un nuevo principio: solo un control in situ al año por explotación.
Refuerzo de medidas de gestión de crisis
Los agricultores de la UE afectados por catástrofes naturales o enfermedades animales recibirán un mejor apoyo gracias a los nuevos pagos de crisis disponibles en el marco de los Planes Estratégicos de la PAC y a herramientas de gestión de riesgos más flexibles y accesibles.
Y habrá más flexibilidad para que los países puedan adaptar sus Planes Estratégicos de la PAC, ya que solo se requerirá la aprobación previa de Bruselas para las «modificaciones estratégicas».
Competitividad y digitalización
Los pequeños agricultores podrán obtener más fácilmente apoyo financiero gracias a una nueva opción de financiación que ofrece hasta 50.000 euros en un solo pago para ayudarles a mejorar la competitividad de sus explotaciones.
Bruselas propondrá de nuevo a finales de este año nuevas medidas de simplificación para los agricultores destinadas a reducir la carga de información y control, así como a facilitar la adopción de las nuevas flexibilidades.