La CE espera que los mercados agrícolas crezcan el 1,1% para 2025 y el 1,5% para 2026
Los mercados agrícolas de la Unión Europea (UE) se mantienen resilientes en términos generales pese a la inestabilidad geopolítica y los desafíos que plantea el clima, según un informe sobre las perspectivas a corto plazo para la agricultura de los Veintisiete que la Comisión Europea publicó este lunes.
El documento alerta también de la «evolución» de las políticas comerciales de países como Estados Unidos y China como amenaza a la estabilidad de los mercados mundiales y de la UE.
Entre otros datos, el informe revela una importante recuperación de la producción del aceite de oliva (37%) que ha llevado a una destacable disminución de los precios en junio de 2025.
También apunta a una producción a la baja para el azúcar y el vino.
Las perspectivas de crecimiento de los mercados agrícolas europeos se sitúan en el 1,1% para 2025 y el 1,5% para 2026.
Estabilidad para la inflación
Por otro lado, la inflación de los alimentos en la UE siguió siendo superior a la inflación general (3,1% frente al 2,2% en mayo), aunque se observa cierta estabilidad, o incluso deflación, en algunas categorías de productos.
Se prevé que la producción de cereales de la UE en 2025 y 2026 aumente un 4,1%, lo que mejorará la balanza comercial, con una subida del 26% en las exportaciones y una disminución del 19 % en las importaciones.
También se espera que la producción de semillas oleaginosas de la UE crezca un 12%, lo que se traducirá en un aumento del 6% en la producción de aceite vegetal.
El informe alerta de que una posible disminución del 8% en la producción de azúcar podría provocar un aumento de las importaciones.
Producción de vino en mínimos
Por otra parte, prevé que la producción de vino de la UE alcance su mínimo en 20 años en la temporada 2024/25, lo que afectará a las exportaciones, mientras que el consumo en la UE seguirá disminuyendo.
En cuanto a las frutas, indica que las adversas condiciones meteorológicas pueden llevar a una caída del 4% en la producción de manzanas y al mantenimiento de los precios altos, mientras que en el caso de los melocotones y nectarinas la bajada podría ser del 5,8%, lo que generaría un récord de importaciones.
Por el contrario, las condiciones climáticas son favorables para la producción de naranjas, que se prevé que aumente un 4,6% desde los mínimos históricos de la temporada anterior.
Además, se prevé que la producción de tomate de la UE disminuya un 2,6%, mientras que la producción de productos frescos se mantendrá estables.
La demanda estable en el comercio minorista y la industria alimentaria impulsa los precios de los productos lácteos en la UE.
Por otra parte, los precios de la carne de vacuno en la UE se mantienen en niveles históricamente altos y la disminución prevista de la producción debido a la reducción del ganado podría limitar las oportunidades de exportación y aumentar las importaciones.
Se prevé asimismo que la producción de carne de porcino en la UE se mantenga estable, con una demanda constante y un aumento de la producción avícola (un 1,8 %) mientras que las importaciones podrían resultar difíciles debido a la situación sanitaria de algunos países de origen.
Por último, la producción de carne de ovino y caprino en la UE podría disminuir un 2%, lo que provocaría una disminución de las exportaciones de carne y un aumento de las importaciones en un contexto de precios altos derivados de la escasez de oferta y la estabilidad de la demanda.