Copa-Cogeca lamenta la decisión de China de imponer aranceles antidumping al porcino de la UE
Copa-Cogeca lamenta profundamente la decisión de las autoridades chinas de imponer aranceles antidumping preliminares a las exportaciones de carne de cerdo de la Unión Europea (UE). En un comunicado, la organización agraria europea recuerda que los productores porcinos de la UE no participan en prácticas antidumping y han cooperado plenamente con la investigación y todas las solicitudes de las autoridades chinas.
En esta fase, aún no es posible realizar un análisis completo de las medidas, pero «su impacto sin duda causará graves perjuicios a los productores porcinos europeos, especialmente en los Estados miembros más activos en el mercado chino», apunta Copa-Cogeca.
Las empresas que colaboraron en la investigación, procedentes de los principales países exportadores de carne de porcino de la UE a China, recibieron derechos más bajos, que oscilaron entre el 15,6% y el 32,7%, mientras que todas las demás recibieron un 62,4%. Para la organización, las consecuencias se dejarán sentir mucho más allá de las exportaciones directas, con una presión indirecta sobre los mercados internos de carne de porcino de la UE. Esta presión se suma a la mayor apertura de los mercados de la UE a los productos porcinos estadounidenses y a un momento general de inestabilidad para las exportaciones de carne de porcino de la UE.
En respuesta al anuncio, Antonio Tavares, presidente del Grupo de Trabajo sobre Carne de Cerdo de Copa-Cogeca, declaró:
«Es inaceptable que los productores europeos de carne de cerdo se vean obligados a pagar el precio de las disputas comerciales políticas. Estas medidas solo sirven para fortalecer a nuestros competidores mundiales y debilitar a los productores de la UE. La Comisión Europea debe replantearse urgentemente su política comercial y garantizar que el sector agrícola no sea utilizado como moneda de cambio en las negociaciones internacionales».
Copa-Cogeca insta a las instituciones europeas a abordar esta cuestión con la máxima urgencia y a garantizar que los productores porcinos europeos no tengan que soportar la carga de disputas comerciales más amplias.