Arraw, el biofungicida de Sipcam Iberia, se consolida en el cultivo de la viña

Araw es la solución contra la botritis y el oídio en vid que Sipcam Iberia lanzó en 2016 como un producto flexible en cuanto a dosis y época de aplicación hasta la cosecha. Este año se ha consolidado como uno de los fungicidas de contacto más relevantes para la uva de vinificación y uva de mesa en España.

Arraw, el biofungicida de Sipcam Iberia, se consolida en el cultivo de la viña

Más allá de las regiones de Galicia y la Rioja, donde Araw ya venía siendo un antibotrítico ampliamente conocido, ha dado el gran salto nacional aumentando su presencia en otras regiones vitivinícolas relevantes como Navarra, Comunidad Valenciana, Castilla y León, Castilla y la Mancha y, sobre todo, en la zona del Ebro, además cde consolidarse en uva de mesa en la región de Murcia.

A pesar de que el inicio del verano arrancó con niveles de mildiu muy elevados, pero sin grandes incidencias de botritis en las semanas previas a la vendimia, Araw ha seguido creciendo a lo largo de este año. “La razón principal es que los viticultores son cada vez más conscientes de la importancia de adelantar las aplicaciones preventivas para evitar pérdidas de producción y de calidad de los caldos”, analiza José Ramón Gómez, delegado de marketing especializado en viña en Sipcam Iberia.

El principal valor diferencial de Araw es su proceso de formulación, que utiliza la exclusiva tecnología de encapsulación Sustaine, desarrollada por la empresa biotecnológica Eden Research. Esta permite el uso del biofungicida de manera segura y respetuosa con el medio ambiente y reduce significativamente la volatilidad de las tres materias de naturaleza terpénica que lo componen: Eugenol, Geraniol y Timol.

Desde el pasado mes de febrero, Araw también forma parte de este catálogo con su certificado ecológico exento de LMR y también ha conseguido el sello en agricultura biodinámica, otorgada por Demeter International, en octubre.

Sipcam Iberia espera celebrar todos estos logros obtenidos con uno último que llegará a finales de año, explica el responsable de bioprotección, Daniel Mulas: “Tras haber tramitado con el Ministerio de Agricultura nuevos registros para Araw, estamos pendientes de aprobación de que nuestro biofungicida de contacto sea apto para uso en un gran número de cultivos hortícolas de aire libre e invernadero”.

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