UPA Málaga alerta de una caída del 80% en la producción de uva pasa
Un sector en serio peligro de extinción. Los productores de uva pasa volverán a sufrir, una campaña más, una drástica disminución productiva. Este año habrá un 80% menos de cosecha, lo que traerá consigo que muchos paseros de la Axarquía se encuentren vacíos y amenaza con la desaparición de un sector que no levanta cabeza.
La sequía y, en especial en esta campaña, el mildiu, han perjudicado seriamente a una comarca que tiene en la uva pasa su producto estrella, del que viven numerosos pueblos y cientos de familias.
El secretario general de UPA Málaga, Francisco Moscoso, explica que la mayoría de los agricultores “no llegarán ni a llenar un pasero y medio en sus explotaciones”, lo que conllevará unas cuantiosas pérdidas económicas, porque los costes de producción se mantienen altos y los ruinosos precios en origen hacen insostenible el cultivo.
“Esta campaña vamos a vivir una situación nuevamente preocupante y muy alarmante. Las lluvias caídas con la Dana habían elevado las expectativas de una buena cosecha, pero la falta de precipitaciones, desde entonces, ha sido muy perjudicial. Y, lo peor, ha sido la elevada incidencia del mildiu, que ha sido la puntilla que hará que la Axarquía, que es la principal productora de uva pasa de Málaga, vea muy menguada la cosecha de este año”, explica Francisco Moscoso.
Desde UPA Málaga vemos con mucha preocupación que el productor no obtenga ninguna compensación de la “pretendida publicidad” que desde las administraciones se le quiere otorgar a la uva pasa mediante reuniones y la pertenencia al Sipam. “No es de recibo que el agricultor no vea beneficio alguno al hecho de que la uva pasa se encuentre catalogada en el Sistema de Patrimonio Agrícola Mundial. Es algo inaudito que no ocurre en otros cultivos con diversas catalogaciones como una IGP o una denominación de origen, en el caso por ejemplo del aceite de oliva. Las producciones con esas figuras de protección tienen unos beneficios que no se contemplan en la uva pasa. Y ahí la Administración debería adoptar medidas encaminadas a una promoción real que repercutan positivamente en los agricultores para que sigan viviendo dignamente de sus cultivos”, concluye Francisco Moscoso.